El sector inmobiliario en 2019 parece que ofrece la madurez necesaria para consolidar un crecimiento paulatino; la clave para regenerar un mercado marcado por la crisis. Repasamos las principales tendencias para comprender de cerca los cambios.
Cierre de año en el mercado inmobiliario, para un nuevo comienzo
El mercado inmobiliario, con sus mecánicas de funcionamiento, se presenta dinámico e impredecible. Aunque sí es cierto que, conociendo su recorrido, se pueden vaticinar las tendencias y direcciones de un mercado imprescindible en la economía.
En este sentido, es saludable cerrar el año haciendo balance de lo ocurrido, y preparándose para lo que pueda venir ¿el objetivo? La mejora constante y estabilización de un sector al que le ha costado salir del bache tras la crisis.
Así, el próximo año se presenta marcado por tendencias que continúan desde hace un par de años, otras cuya semilla ha surgido este año y continuarán mientras que algunas se basan en vaticinios con poca solidez.
Para empezar, se prevé una estabilización y madurez del mercado de dos años previa a una breve desaceleración. Además, la burbuja de alquiler derivada del turismo seguirá siendo el centro de la conversión en los principales ayuntamientos y Gobierno.
Con respecto a la compraventa, se consolida el alza eso sí, paso a paso. Aunque como siempre, la falta de suelo y escasa legislación son la espada de Damocles que hace peligrar la superación de la crisis, con posibles recaídas.
Y en general, la mejora del mercado proyecta un panorama laboral positivo, con subidas salariales y demanda de profesionales preparados.
En definitiva, el panorama para el 2019 se presenta, por suerte, variado con retos a superar y errores que subsanar.
Por ello, hoy hacemos un repaso de lo que nos espera en 2019. No te lo pierdas.
2019: Retos que consolidan la madurez a impulsan cambios legislativos
El año 2019 se podría definir con una palabra: ‘estabilización’, donde tras unos años de incertidumbre, parece que el despegue comienza a asentarse, aunque tal y como adelantábamos, con peligro por la falta de suelo. Aun así, las tendencias parecen ser las siguientes.
Aumento de la Inversión
El aumento de la inversión inmobiliaria parece asentarse en zonas determinadas como la Comunidad Valenciana, Barcelona, Costa del Sol, Baleares y Madrid.
Con epicentro en estas zonas, la tendencia podría extenderse a otras zonas. Aunque de momento solo se producirían en los principales núcleos.
Más empleo, con mayor formación
El crecimiento del sector apunta a una mejora de las condiciones laborales del sector, y de los requisitos para acceder al mismo.
Atrás quedó la época donde los actores ávidos de rentabilidad sin formación y experiencia llegaron a desestabilizar el mercado inmobiliario. Por suerte, el sector ha aprendido, e incluso las legislaciones comienzan a cambiar el panorama.
Así, la apuesta por el talento, los profesionales con perfil técnico y formación parece ser el hilo de decisión en las tendencias de las principales inmobiliarias, no solo en España, también en Europa. Lo que conlleva, inevitablemente, una subida de la calidad de servicio, y por lo tanto salarial: casi un 12% en 2019.
Una balanza hipotecaria a favor de los contratantes
Los escándalos hipotecarios con el consentimiento de los sucesivos gobiernos parecen tener los días contados, con la nueva ley de crédito hipotecario, que promete cambiar el panorama en 2019.
Mayor control de alquiler turístico
La burbuja de alquiler derivada de las plataformas turísticas, comienza a tener el coto de los gobiernos, que comienzan a imponer sanciones a nivel fiscal y administrativo; con la revisión de medidas de prevención y control.
Precio de la vivienda
El precio de la vivienda es sin duda uno de los principales termómetros para medir la salud del mercado inmobiliario. Así, en 2019 los precios continuarán subiendo, pero de manera estable y moderada.
En lo que se refiere a los pisos de segunda mano, según el Índice Inmobiliario de Fotocasa, 2018 cerrará con una subida media anual del precio del 7,8%, el mayor registro desde 2006, cuando se cerró con un aumento del 7,7%.
Compraventa que se consolida
Las operaciones de compraventa también presentan un crecimiento moderado. Según Tinsa, grupo especializado en las tasaciones inmobiliarias, la compraventa aumentará un 5%.
El suelo continuará siendo un quebradero de cabeza
La falta de suelo para construir en zonas clave y en pleno crecimiento como Madrid y Barcelona, unida a la lentitud a la hora de obtener los permisos, es un factor que puede revalorizar y disparar los precios del stock ya existente, y eso sería la mecha de que propagaría una nueva burbuja. Por el momento, el diálogo entre promotoras y administraciones parece ser la solución.
Conciencia sostenible
Poco a poco comienza a instaurarse una mayor conciencia por un sector más sostenible, a todos los niveles, garantía de un crecimiento estable tanto económico, como social, y un preventivo frente a futuras crisis del sector.